Lo que hace unos años comenzó como una original idea, el fotografiar cuerpos desnudos bajo el agua, en la actualidad se transformó en una verdadera empresa, claro que cambió el trasfondo artístico por uno más pedestre: Hoy el gringo Mark Yasenchak se gana la vida filmando películas porno submarinas (en la foto).Tal cual, porque en gustos no hay nada escrito, y menos cuando se trata de sexo, por lo que el hombrón se topó con una creciente lista de interesados en sus filmes."La gracia de un cuerpo humano en el medio acuático es deslumbrante, posee un halo de secretismo", explica Yasenchak sobre su "arte".Además, el fotógrafo se ha visto favorecido por la nueva generación de cámaras para filmar bajo el agua.Sus películas tienen dos modalidades: Con tubo de oxígeno o el buceo a pulmón.
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