¿El vibrador o el natural?

Leo una encuesta poco ortodoxa que se realizó durante una feria entre unas 10.000 personas -dicen-, que visitaron el stand de una empresa que organiza reuniones de tupersex, según la cual el 90% de las mujeres se imagina utilizando juguetes eróticos.
Si se lo imaginan es que no los usan. De lo contrario hubieran respondido que sí, que tienen un vibrador o similar y que suelen "jugar" con él. Pero seguro que fueron muy pocas las que respondieron esto. La mayoría, se dejaría llevar por la corriente de no parecer demasiado lelas si decían que nunca habían usado un cacharrito sexual, pero tampoco parecer muy descaradas y totalmente abiertas a esta experiencia.

Que los cacharritos son cada vez más utilizados, sí, pero que no corremos tanto como quieren los fabricantes, también.
El verano pasado otra empresa propuso un concurso bastante ridículo que consistía en que te llevaras tu juguetito de vacaciones y le hicieras fotos, no usándolo, que tendría mucho más interés, sino en lugares emblemáticos que visitaras. Era un concurso de postales de vibradores, sin ningún interés.
Tengo una amiga que dice que, precisamente de vacaciones, una no se lleva el juguete porque tiene tiempo y ocasiones para jugar con el natural. Y yo pienso que, aunque me gustan los juguetes sexuales, tiene mucha razón.