Todo referente al sexo: marzo 2013

Tengo un grupo de 5 mujeres, donde nos intercambiamos fotos eróticas nuestras. Estas 5 mujeres son:

Montse de 33 años, soltera, Ana de 35 años casada, estas dos fueron compañeras mías de trabajo. Pilar de 50 años casada y Eva 45 años separada, estas dos son amigas del grupo que solemos salir y Juani 46 años, casada, es vecina del pueblo

La verdad es que es bastante morboso el enviarlas fotos mías y recibir suyas donde las he visto completamente desnudas, eso sí, salvo una, el resto de las mujeres nunca nos hemos visto desnudos en realidad.

Un día me llamo Montse para quedar a comer cerca de su casa ya que llevábamos tiempo sin vernos y así aprovechar a enseñarlas fotos que tenía en el móvil desnudo

Llegado la hora acordada, me acerque a la entrada del restaurante, Montse todavía no había llegado, estuve esperando unos 5 minutos aproximadamente, cuando la vi aparecer, acompañada de otra mujer.

Pensé, que si esa chica iba a comer con nosotros me había fastidiado el enseñarla las fotos.

Cuando estaban a mi altura, Montse me dio dos besos y me presento a su compañera. Se llamaba Marina.

Marina, era una chica de 35 o 36 años, algo gordita, pelo largo y rubio, cara redonda con la piel blanca, sus pechos parecían grandes y un trasero gordo.

Después de las presentaciones, Montse me pregunto si me importaba que estuviera Marina con nosotros, yo la dije que no había problemas, así que entramos en el restaurante, pidiendo algo de comer.

La comida, fue bastante amena, cuando llegamos a los postres, sin venir a cuento, Marina me miro y me dijo, que Montse la había enseñado alguna foto mía.

- Como una foto mía? Pregunte.

- Si, continúo Marina, de esas que se ve tu pene.

Yo enrojecí, no sabía que decir, así que lo negué, pero Montse confirmo que se las había enseñado.

- Porque lo has hecho?

- Porque, un día que me mandaste unas fotos por el whatsap estaba ella y las vio. Dijo Montse, ella me pregunto quién era, y la dije que eras tú. Me dijo Montse que quería conocerte

- Porque querías conocerme? Pregunte a Marina.

- Porque me gustaron las fotos, me dijo Marina. También me comento Montse que nunca te la había visto de verdad, continuo

- Es cierto, la dije, solo lo ha visto en foto

- Y porque no se lo has enseñado, siguió preguntando Marina.

- Yo se lo he dicho que si quería verla de verdad, y ella no ha querido.

En ese momento, Montse nos dijo, yo me tengo que ir, quedaros vosotros ya hablamos.

Nos despedimos, la dimos dos besos cada uno, Montse se fue, quedándonos los dos solos, Marina y yo.

- Tienes fotos para enseñármelas? Me pregunto Marina.

- Si, la conteste.

Saque el móvil y empecé a enseñarla fotos mías, en ella se veía fotos de mi pene en todas las posiciones y ángulos.

Ella las miraba, mientras lo hacía, mi pene aumentaba de tamaño, apretándome sobre el pantalón.

- Esta bastante bien, me dijo

- Te gusta? La pregunte.

- Si, la tienes bastante gorda

- Gracias.

- Pero me gustaría verla de verdad, me dijo Marina.

- Por mí no hay problemas, pero dónde?

- Podemos ir a mi casa a tomar el café y allí me la enseñas.

- Vives sola? La pregunte.

- Vivo con mis padres, pero ellos están en el pueblo y hasta la semana que viene estoy sola.

Acepte la invitación.

Pagamos y nos fuimos a su casa. Ya dentro me ofreció un café, mientras lo tomábamos, me dijo que quería ver más fotos, yo le ofrecí, el móvil para que viera lo que quisiera, eso hizo. Cuando termine el café, Marina me dijo que la gustaría que se la enseñara.

- Por mí no hay problemas, pero tú me enseñaras algo?

- Que te gustaría que te enseñe?

- Todo, la dije

- Jajajajajaja, se rio, miro a mi paquete contestándome que sí.

Me levante de la silla, me fui quitando la camisa, luego me fui quitando los pantalones, dejando solo el slip.

- Continua, me dijo.

- Ahora te toca quitarte a ti algo, la dije

Se incorporó, se quitó el jersey, llevaba un sujetador de color negro, luego se quitó los pantalones, quedándose en sujetador y bragas.

Yo estaba empalmadisimo, y lo notaba en el bulto del slip

- Te toca, me dijo

Sin pensarlo dos veces, me baje el slip, dejando libre mi polla que la miraba a ella. Marina, no dejaba de mirarme el pene.

- Wwwooowww. La tienes gordísima, exclamo

- Ahora tú, la dije

Ella se desabrocho el sujetador, dejándome ver sus pechos grandes, blancos y con unos pezones grandes y rosados, luego se quitó la braga, tenía un peluche negro y poblado.

- Ya estamos los dos desnudos, la dije

Ella sin decir nada, me agarro de la mano, llevándome hasta su habitación, me hizo tumbar boca arriba en la cama. Agarro mi polla con la mano, acariciándome los huevos, y metiéndose todo el pene en la boca. Estuvo jugando con su lengua y mi capullo, luego se la saco de la boca, y con la lengua hizo varias pasadas por el tronco del pene, después bajo hacia mis testículos, dejándomelos bien húmedos, luego se los metía en la boca y succionaba, me estaba haciendo una comida de bajos impresionante, Mi polla estaba durísima.

Después de estar jugando con mi pene con su lengua, se puso de pie, abrió las piernas, dejándolas a cada lado de mi cuerpo y se fue bajando hasta encontrar su vagina húmeda con mi duro pene, lo agarro con la mano, apunto a su agujero y se sentó, clavándosela entera.

Empezó a cabalgarme, veía como sus tetas subían y bajaban, con mis manos, las agarre, manoseándolas, ella gemía en cada embestida, después de un rato, ella se levantó, se puso sobre la cama a cuatro patas, me levante, me acerque por detrás, agarre mi polla y apuntando a su chocho volví a clavársela.

La fui follando, hasta que empezó a gritar diciéndome que se corría, yo seguía embistiendo cuando empezó a gritas y a temblar del clímax que estaba teniendo, cuando termino, saque mi polla que estaba llena de sus flujos, me fui hacia adelante, he hice que me la chupara, ya que me faltaba muy poco para correrme.

Me volví a tumbar con la polla tiesa hacia el techo, ella siguió mamándome el pene, la dije que estaba a punto de correrme. Ella me dijo que me corriese, que quería tragarse toda la leche, y eso hice, empecé a correrme, ella tenía mi polla en su boca, tragándose mi semen, y lamiendo todo el pene para no dejar ninguna gota suelta.

Cuando termino de lavarme el pene, se levantó, yendo al baño a limpiarse.

Yo me quede tumbado en la cama, cuando Marina volvió, se acostó a mi lado.

- Tienes una polla gordísima, estas seguro que Montse no te la ha visto? Me dijo Marina.

- No, conteste, solo en foto, se lo propuse y no quiso

- Peor para ella, dijo

- Puedo pedirte algo? Me pregunto Marina

- Dime

- Me gusta que me den por el culo, y quiero que tú me des, pero despacio ya que la tienes muy gorda, quieres?

- Claro, la dije.

- Tengo un aceite, para que pueda entrar bien, espera que lo traigo, dijo

Se levantó, se fue al baño, trayendo un bote de aceite. Se acercó a mí, se echó un poco de aceite, cogiendo mi pene flácido y tocándomela para que se pusiera dura, después de varios toques, mi pene reacciono, volviendo a cobrar vida, endureciéndose, ella continuo pajeandome, llenándome el pene de aceite.

Luego, cuando yo ya estaba a punto, se puso a cuatro patas, yo me acerque a su culo, y cogiendo el bote de aceite, se lo eche en su agujero, metiendo un dedo para dilatarlo, luego metí otro, estando jugando con mis dedos dentro de su culo. Ya dilatado, acerque mi pene a su ano, y empezó a empujar, ella gemía un poco por el dolor, cuando ya metí mi capullo, continué empujando hasta meter toda mi polla en su agujero.

Continué con el movimiento del vaivén, tenía el culo apretado, haciéndome disfrutar de cada movimiento.

Después de un buen tiempo, la dije que me iba a correr, ella me dijo hazlo dentro, quiero sentir tu leche caliente en mi culo.

Ya no aguante más, y me corrí en su interior. Cuando deje de eyacular, saque mi polla del interior de su culo, vi cómo le salía mi leche que resbalaba hacia su vagina. Estuvo un rato en esa posición, luego se levantó yendo al baño a limpiarse.

Yo me quede tumbado en la cama hasta que ella llego, tumbándose a mi lado.

- Joder tío, me has dejado el culo dolorido, me encanta, me dijo Marina.

- Me encanta que te haya gustado.

- Podrías hacer lo mismo que a Montse, mandarme fotos al móvil? Me pregunto.

- Claro, dame tu número de teléfono

Marina, me dio el numero apuntándolo a mi móvil

Después de estar un rato tumbados en la cama, nos levantamos, nos vestimos y me ofreció algo para toma, que hice con gusto. Luego me despedí de ella y me fui.

Cuando Salí, ya en el metro, decidí mandarla unas cuantas fotos por el whatsap, ella me contesto dándome las gracias por las fotos y por la tarde que la he hecho pasar, y que la siga mandando más fotos.

También me pregunto, que si algún día podríamos quedar para follar otro día, la dije que sí.

A los dos días de esto mande fotos al grupo de 6 chicas que tengo ahora, recibiendo alguna foto de ellas, también Montse además de mandarme alguna foto, me pregunto qué tal con Marina, contestándola que bien.

Montse me comentó, que ya sabía lo que había pasado con Marina, y la pregunte que la había dicho, y Montse me dijo que se lo había pasado muy bien.